Diversas repercusiones, ecos, y manifestaciones, se han producido en el Mundo debido a la muerte del líder de Al Qaeda – Osama Bin Laden. Presidentes de naciones de todo el planeta han expresado su vinculante apoyo a las palabras de Barack Obama, quien históricamente tuvo el poder resolutivo sobre la vida y la muerte del terrorista más buscado, mentor del atentado a las Torres Gemelas y también atentados en otros en países de Europa y África, hechos donde perdieron la vida miles de personas inocentes entre niños y mujeres.
“el Mundo y en especial los norteamericanos, están desde ahora más seguros” dijo Barack Obama. Definitivamente quien admita estas palabras y las crea, vive y vivirá en ilusión. La Seguridad como tal es certeza, y la certeza o certidumbre, es el conocimiento evidente de que algo es cierto. En ese contexto entonces, ¿alguien puede asegurar que con la muerte de Bin Laden, el terrorismo sea menor, se reduzca, o no tenga manifestaciones futuras?.
Más allá de la frontera del fundamentalismo y de la religión islámica, existe una población, existen personas, que a diario son atropelladas por un sistema occidental (capitalista y vertical) que horada y daña la buena convivencia internacional, imponiendo esquemas culturales y socioeconómicos, que son muy ajenos a los que poseen esas civilizaciones desde hace milenios. Es razonable existan extremismos en odios y ánimos de venganza contra el llamado “imperialismo” norteamericano, más cuando si observamos que los estadounidenses, no son precisamente todo lo solidarios y buenos vecinos que la humanidad espera que sean. Innegablemente por tanto han existido y existen: abusos, excesos, guerras, descriterios, y por tanto, miles de efectos transversales que de esos errores, resultan en poblaciones resentidas y solo esperando la oportunidad para hacer saber su dolor.
Muy de soslayo se ha dicho que la intervención norteamericana en Pakistán, no estaba autorizada y también que el asesinato se efectuó en condiciones civiles. Mucho también concuerdo en que el ícono del terrorismo llamado Bin Laden sería víctima de sus propios designios, y su muerte sería no solamente un asesinato, sino que contemplaría condimentos de saña y furia como en un rito de venganza, razón aquella por la que a mi juicio se ha prohibido la publicación de videos y fotos de la operación.
No existe la SEGURIDAD y eso es definitivo, mucho más osada entonces es la aseveración cuando se habla de TERRORISMO. Los líderes mueren, desaparecen y se extinguen, pero surgen otros, que incluso ya viven, pero no saben que mañana liderarán causas homicidas como aquella. Lo claro de todo esto es que nuestro mundo cada día es más INSEGURO. La naturaleza, la salud, la vulnerable economía, la estabilidad laboral, etc. … quién puede asegurarnos algo?
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