REDES SOCIALES, ... prudencia al cubo

En principios de Septiembre pasado, el presidente Obama al inaugurar el año escolar en Norteamérica se dirigió a los niños y jóvenes del país haciendo un especial énfasis sobre los peligros y la responsabilidad que se debe tener con las redes sociales, en cuanto a la entrega de información y lo que se sube a la web, en especial debido a las consecuencias tanto en el mediano como en el largo plazo que aquellas puedan eventualmente tener. Dijo puntualmente "bueno, permítame darle algunos datos prácticos. Primero que todo, quiero que todos acá sean cuidadosos sobre lo que colocan en Facebook, debido a que en la era YouTube, lo que hagan, saldrá nuevamente luego en algún momento de su vida", explicó Obama, entonces seguido dijo "Y cuando eres joven, cometes errores y haces algunas cosas estúpidas. He estado escuchando mucho sobre jóvenes que están colocando cosas en Facebook y repentinamente postulan a un empleo y alguien ha realizado una búsqueda", agregó.

Tan relevante es lo expresado por el presidente, que en la actualidad las empresas americanas en porcentaje de aproximadamente el 50% (y van en aumento), elijen como dato a considerar los antecedentes del candidato a algún puesto de trabajo, situados esos datos en sus propias redes sociales. Por tanto se concluye que la "vitrina" o la exposición, puede ser importante no solamente para mostrarse sino también para ser investigado.
No digo que facebook y otros millones de sitios sociales tengan de hecho a mi juicio, malas intenciones o pretendan cambiar las políticas de privacidad desde un principio. Sucede que cambios en los intereses, las nuevas tendencias, las eventuales ventas o fusiones de los sitios, y también hasta modificaciones leves, pueden potencialmente generar una exposición inapropiada y hasta peligrosa en manos de los infaltables inescrupulosos que merodean en la internet. Qué se debe hacer? … o bien, qué nos queda por hacer? … la respuesta es: solo aplicar una mayor y cada vez más atenta responsabilidad virtual, ser consecuentes con lo escrito y también con lo que se cuelga en la red, negar información específica y detallada aunque algunos sitios exijan como obligatoriedad entregarla, etc.
Ya hace un tiempo Facebook saltó a la palestra quedando al descubierto que se violaban algunas políticas de privacidad, lo cual fue negado con argumentos distractivos y sin verdadero peso que permitiera sustentar la cuestionada credibilidad de sus creadores. Hoy nuevamente está en el ojo del huracán. Pero las redes sociales más allá de su conectividad inmediata con varios y con algunos o con alguien, es un fenómeno que indeclinablemente crecerá y crecerá aún más. Lo claro es que las dificultades y los problemas que traerán a cada uno, son aún insospechados, pero seguramente a diario a más de alguien le trae alguna consecuencia en su realidad.