En la tranquilidad de este Sábado pasado y en esas horas quietas, cuando me alejaba del trabajo y de las responsabilidades para vivir el descanso, leía como siempre mi favorita Revista Sábado, revista que a propósito espero con ansiedad, como recuerdo esperaba semanalmente la revista Mampato en mi niñez.
En esta oportunidad me impactó el artículo que hace mención al estudio antropológico sobre nuestra juventud chilena, y admito la objetividad a su vez la visión integral que aquel nos entrega. Al leer el artículo, me fue imposible abstraerme de los planos comparativos y colocar en la balanza las diferencias entre la juventud vivida hace años, con la juventud que se vive hoy. En buenas cuentas no es muy grande la brecha, pero sí significativa en algunos aspectos.
Recuerdo las tendencias en mi juventud no estaban tan segmentadas como hoy (debe ser la admisión de la diversidad), … recuerdo que no estábamos tan seguros de nuestro futuro sino que aplicábamos inercia a la vida (es mi parecer y puedo estar equivocado siempre), … la juventud de hoy marca sí una diferencia relevante a la hora de compararse a otras generaciones: está mejor informada, … es más crítica, … asume con mayor tolerancia las diferencias, …
Concluía luego de mirar a mis tres hijos ya jóvenes: … estaré viejo? … o sin darme cuenta deje de ser ese joven que alguna vez fuí? … ... parece.
En esta oportunidad me impactó el artículo que hace mención al estudio antropológico sobre nuestra juventud chilena, y admito la objetividad a su vez la visión integral que aquel nos entrega. Al leer el artículo, me fue imposible abstraerme de los planos comparativos y colocar en la balanza las diferencias entre la juventud vivida hace años, con la juventud que se vive hoy. En buenas cuentas no es muy grande la brecha, pero sí significativa en algunos aspectos.
Recuerdo las tendencias en mi juventud no estaban tan segmentadas como hoy (debe ser la admisión de la diversidad), … recuerdo que no estábamos tan seguros de nuestro futuro sino que aplicábamos inercia a la vida (es mi parecer y puedo estar equivocado siempre), … la juventud de hoy marca sí una diferencia relevante a la hora de compararse a otras generaciones: está mejor informada, … es más crítica, … asume con mayor tolerancia las diferencias, …
Concluía luego de mirar a mis tres hijos ya jóvenes: … estaré viejo? … o sin darme cuenta deje de ser ese joven que alguna vez fuí? … ... parece.
Desafortunadamente, no leì el artìculo al que se hace referencia aqui, pero eso no es impedimento para poder dar mi opinion, aunque tengo mis dudas de si esta sera muy objetiva o no. Quizas porque mi juventud transcurrio en un entorno burgues, los que me rodeaban si teniamos claro lo que queriamos hacer en nuestro futuro, teniamos claro como queriamos proyectarnos, cosa distinta es si eso se cumplio o no, pero si puedo asegurar que la mayoria sì logroconcretizar sus sueños profesionales, cosa que, en estos tiempos, en nuestra juventud actual no sucede.
ResponderBorrarLos jovenes de antaño no discriminaban tanto. Noexistia esa cantidad increible de grupos que existen actualmente...pelolais, pokemonas, emos, etc, que lo unico que logran es resaltart aun mas las diferencias sociales y economicas de la juventud, aumentando aun mas la brecha que existe entre ellos.
Si concuerdo en el sentido de que los jovenes de hoy estan mas informados, tienen opinion respecto a muchos temas y son mas criticos del sistema social y economico que les ha tocado vivir. Pero no olvidemos que si eso sucede ahora, es porque existe menos censura, ahora se conversan temas que antes eran considerados tabu.
No se si sera cierto eso de que uno siempre es joven..creo que no.
En mi caso particular, fui una rebelde durante mi juventud, con causa o sin ella, no viene al caso.
Solo puedo concordar con Alejandro cuando se pregunta..estare vieja?? o sin darme cuenta deje de ser la joven que alguna vez fui y eso me genera sentimientos extraños..
Maria Eugenia